La actividad turística en México se desaceleró al cierre del año pasado. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el PIB turístico del 2018 creció 2.1%, el menor crecimiento de los últimos cuatro años (en el 2014 se incrementó 1.9%), y se mantuvo ligeramente por encima del PIB nacional.
Con base en los Indicadores Trimestrales de la Actividad Turística (ITAT), el rubro de servicios creció en su comparación anual 2% y el de bienes 2.3 por ciento.
En el caso de los primeros, el instituto considera, entre otros temas: alojamiento, transporte, agencias de viaje, operadores de tours y servicios de apoyo al turista que directamente proporcionan las empresas estatales como CAPUFE, y Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA).
En tanto, el segmento de bienes está relacionado con las artesanías, ropa de playa, trajes de baño, maletas y tiendas de campaña.
“No es una sorpresa la cierta desaceleración que se presentó porque hubo un menor crecimiento en el turismo no fronterizo (el receptivo) que es el que ha movido en estos últimos años la actividad. Hay que mencionar que la actividad turística sigue arriba del PIB nacional”, consideró el director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac México Norte, Francisco Madrid Flores.
Al cierre del 2018, el consumo interior del turismo receptivo (que se determina, entre otras cosas, luego de consultar a los viajeros sobre costo, divisa utilizada o si fue con un plan todo incluido) creció 3.1% (en el 2017 se incrementó 4.7% y un año antes 25 por ciento).
Desde la perspectiva del especialista, el cambio de gobierno del año pasado no generó alguna afectación en el comportamiento del PIB, que correspondió a la gestión del expresidente Enrique Peña Nieto, y estimó que los eventuales efectos de la desaparición del Consejo de Promoción Turística con la nueva administración federal serán evidentes hasta la medición del tercer trimestre del 2019.
Adicionalmente, la información del PIB turística considera, por primera ocasión, la información del cuarto trimestre del año pasado, cuya responsabilidad en la aplicación de la metodología está a cargo del Inegi, que ha reportado que las divisas turísticas crecieron a doble dígito el primer trimestre del año.
Un cuarto trimestre débil
Durante el cuarto trimestre del 2018, el Indicador Trimestral del PIB Turístico y el del Consumo Turístico Interior crecieron 0.2% de manera individual en términos reales frente al trimestre inmediato anterior con cifras desestacionalizadas, mientras que en su comparación anual se incrementaron 1.5 y 1.9%, respectivamente.
En el caso del consumo turístico interior, las cifras destacan que el realizado al interior del país fue el único con signo negativo (-0.2%), lo que sí se puede atribuir a un eventual efecto por la transición política.
Para el presidente del Grupo Bojórquez, Armando Bojórquez, las cifras del INEGI reflejan que el cierre del año pasado estuvo acompañado de algunas incertidumbres dentro del país, las cuales se han comenzado a disipar en los primeros meses del 2019.
“Es momento de seguir trabajando en colaboración con las autoridades para apuntalar el ritmo positivo que habíamos mostrado en años anteriores, donde el PIB turístico, incluso, llegó a alcanzar el doble del crecimiento de la economía. Y debemos reconocer que en la promoción de los atractivos todos debemos participar”, señaló. (El Economista).
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