El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su intención de imponer una clausura definitiva a la mina a cielo abierto Sac-Tun (anteriormente conocida como Calica), ubicada en Playa del Carmen, Quintana Roo, y propiedad de la empresa estadounidense Vulcan Materials.
En su conferencia matutina, López Obrador explicó que su gobierno ha hecho esfuerzos significativos para alcanzar un acuerdo con los accionistas de Vulcan y detener el “ecocidio” causado por la explotación de la mina. Aunque actualmente está clausurada por la autoridad ambiental y en proceso de arbitraje internacional, el mandatario expresó su deseo de que la clausura sea permanente.
Propuestas y disputas legales
López Obrador mencionó que su administración ha ofrecido a Vulcan Materials la compra del terreno de 2,400 hectáreas o la posibilidad de convertir la mina en un destino turístico. Sin embargo, afirmó que los dueños de la empresa están decididos a seguir explotando el yacimiento, buscando incluso la intervención de legisladores estadounidenses para impedir lo que consideran una “expropiación ilegal”.
El presidente aclaró que no se trata de una expropiación, sino de aplicar la ley para evitar la destrucción del territorio. “Es una clausura a una mina que destroza nuestro territorio”, enfatizó, asegurando que resolverá esta situación antes de finalizar su mandato.
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