Los hoteleros de Cancún se preparan para solicitar una moratoria que frene el crecimiento de la Zona Hotelera, ante la falta de infraestructura suficiente para cubrir la creciente demanda de servicios públicos como agua, electricidad y drenaje. Esta petición se presentará formalmente durante la próxima reunión del Fideicomiso de Mantenimiento de la Zona Hotelera de Cancún, organismo que reúne a los principales actores de la industria en la región.
Jesús Almaguer, presidente del Consejo Hotelero del Caribe Mexicano y de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres (AHCPM&IM), destacó que existe un consenso general entre los hoteleros para pausar el desarrollo de nuevos proyectos hasta que se cuente con una infraestructura adecuada. Aunque el puente Nichupté, en construcción, podría aliviar problemas de movilidad, no aborda la escasez de servicios esenciales en la zona.
“Es importante que la zona hotelera se mantenga tal cual y que, al mismo tiempo, se modernice la infraestructura de servicios públicos”, afirmó Almaguer. A pesar de que la inversión en el destino sigue siendo bien recibida, los hoteleros consideran fundamental poner un alto a nuevas construcciones hasta que las redes de suministro sean actualizadas.
El Fideicomiso de la Zona Hotelera, encargado de regular aspectos como la imagen urbana, seguridad y servicios en la región, será el principal canal de comunicación para esta propuesta. Se espera que el Gobierno del Estado convoque a una reunión antes de que termine el año, donde se oficializará esta solicitud.
La moratoria no solo busca frenar el desarrollo hotelero, sino que también implica un esfuerzo para actualizar las redes de suministro de servicios, que fueron instaladas hace décadas y no han sido modernizadas a la par del crecimiento del destino turístico. La intención es evitar que las deficiencias en infraestructura continúen afectando tanto a los turistas como a los residentes, especialmente durante temporadas de lluvias, cuando los problemas se vuelven más evidentes.
El sector hotelero insiste en que esta pausa es necesaria para garantizar el éxito continuo de Cancún como destino turístico, evitando que el crecimiento descontrolado comprometa la calidad de los servicios y, por ende, la experiencia del visitante. (Confirman que Rodrigo de la Peña será el sucesor de Jesús Almaguer).
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