Ante la inminente temporada alta de diciembre, en la que algunos hoteles han reportado la urgencia de que el semáforo epidemiológico migre a verde por los niveles de reservaciones que rebasan en muchos casos 60 por ciento, que actualmente se tiene permitido con el semáforo en amarillo, el gobierno de Quintana Roo contempla la posibilidad de establecer un protocolo superior mediante el cual los hoteles y atracciones turísticas puedan acceder a mayor ocupación a pesar de permanecer el semáforo en amarillo.
El subsecretario de Salud federal Hugo Lopez Gattel dio esperanzas a los turisteros del Caribe Mexicano, ya que hace un par de semanas mencionó en una mañanera, que Quintana Roo era de los que estaba haciendo las cosas bien, y que probablemente fuera de los que próximamente avanzara a semáforo verde, situación que no se ha dado. (Se acerca Quintana Roo a semáforo verde por COVID-19: López-Gatell).
Por el contrario, el gobernador Carlos Joaquín González ha dejado claro que hemos dado un paso atrás rumbo al verde y nos acercamos más al naranja, por lo que ha invitado a todo la ciudadanía a no aflojar en sus medidas de prevención y precaución.
El protocolo superior que daría la posibilidad de al menos 80 por ciento de ocupación, se tendría que acreditar ante las secretarias de Salud y de Turismo, e incluye incluso el practicar pruebas rápidas, PCR o de antígeno para elevar la efectividad de la protección a huéspedes y trabajadores.











