Grupo Vidanta se fijó el 19 de enero de 2021 como fecha tentativa para comenzar las operaciones de Vidanta Elegant, el primer crucero mexicano de gran lujo que viajará de Puerto Vallarta a Mazatlán.
La embarcación de 152.2 metros de eslora llegó a Puerto Vallarta el pasado sábado para preparar los últimos detalles con los que asegura ofrecerá un servicio sofisticado enfocado en el segmento de lujo.
La llegada de Vidanta Elegant es una buena señal para la industria turística de Puerto Vallarta, pues el inicio de operaciones representaría el reinicio de los viajes en altamar por el Pacífico mexicano.
El navío hará la ruta de cabotaje Puerto Vallarta-Mazatlán-Puerto Vallarta. Tendrá una capacidad de 298 pasajeros y 149 camarotes y suites con vista al mar, distribuidos en seis cubiertas. También, cada cabina tendrá servicio de concierge para garantizar una atención totalmente personalizada.
Vidanta Elegant será un crucero exclusivo sólo para adultos y ofrecerá experiencias inmersas en el segmento de lujo y placer. Está equipado con 12 elegantes restaurantes de especialidad para deleitar a los clientes más exigentes.
Además cuenta con bares, spa, gimnasio integral, espectáculos de entretenimiento nocturno, boutiques y piscina en la cubierta superior que brindará a los pasajeros espacios de confort y exclusividad.
El crucero llegó sin pasajeros a bordo y con 124 tripulantes de diferentes nacionalidades para su operación y funcionamiento.
La embarcación estará atracada en el muelle 2 del puerto, mientras se realizan los últimos acabados para iniciar próximamente operaciones, donde también se le brindarán los principales servicios portuarios y realizará el embarque de tripulantes para completar su plantilla de colaboradores.
A su llegada se llevaron a cabo los protocolos que se siguen en los puertos por la pandemia de covid-19, que contó con la presencia de servidores públicos de Sanidad Internacional, Migración, Aduana y SENASICA, quienes llevaron a cabo la “Libre Plática” para verificar la salud de la tripulación, emitir las constancias y autorizaciones correspondientes, así como garantizar la seguridad del crucero y de la comunidad marítimo-portuaria. (Vidanta ahora va por un astillero para armar cruceros)
