Las empresas hoteleras instaladas en principales polos turísticos del país como Los Cabos, Mazatlán y Riviera Maya, sobreviven al impacto de la pandemia por el COVID-19 con restricciones a la movilidad y la reapertura del sector; sin embargo, cuestionan la falta de apoyo por parte del gobierno para incentivar el turismo ante la emergencia.
Empresarios, líderes y analistas reunidos en el foro “Global Travel” de EL FINANCIERO con la ponencia “¿Qué ven los inversionistas en materia de turismo?” señalaron la importancia de contar con un fondo de recursos suficientes para paliar los efectos negativos de la pandemia ante el cierre de algunos hoteles por hasta 90 días y en algunos casos sufrir quiebras o reconversiones.
“Mientras no tengamos un fondo que se genere con el mismo flujo turístico, todos los esfuerzos que quiera hacer la Secretaría de Turismo y los gobiernos estatales son inútiles, es muy poco lo que se puede lograr”, señaló Ernesto Coppel, presidente de Grupo Pueblo Bonito.
Agregó que gracias al turismo carretero, la empresa ha logrado recuperar hasta 85 por ciento los niveles de ocupación hotelera en ciudades como Mazatlán y Los Cabos, aunque señaló que por el impacto económico se han detenido proyectos en San Miguel de Allende y Cancún por hasta dos años.
Por su parte, Alejandro Zozaya, presidente Ejecutivo de Apple Leisure Group, dijo que, a nivel nacional, durante el verano el mercado reaccionó bien con ocupaciones entre el 30 y 40 por ciento, mientras en Quintana Roo, donde operan, superó hasta 55 por ciento. (Hoteleros del Caribe mexicano prevén ralentización de la recuperación turística).
Una de las principales preocupaciones de la firma es el desperfilamiento de los turistas promedio y la caída en la actividad del turismo de reuniones y convenciones.
“México ha tenido una recuperación más rápida, particularmente Quintana Roo; sin embargo, hay mucho por hacer, ojalá tuviéramos un presidente que le interese el turismo y entendiera sus beneficios”, dijo. Señaló que un bajo presupuesto a las dependencias relacionadas como la Sectur dificulta la cooperación para atender este problema.
Comentó la necesidad de homologar los protocolos con los países miembros del G20 para implementar las mismas reglas y mover a más del 80 por ciento del turismo mundial, de forma segura, por lo menos en los próximos dos años mientras no exista efectividad de una vacuna contra el virus.
Finalmente, José Chapur, presidente de Grupo Palace Resorts, cadena que opera en México y el Caribe, dijo que la pandemia ha mostrado que existe mayor confianza en los viajeros que ingresan al país, por menores restricciones y más protocolos sanitarios, sin embargo sin coordinación con el gobierno ven difícil la recuperación del sector hotelero en el mediano plazo.
“Hay buena disposición pero no es suficiente, ojalá que pronto el Consejo y Diplomacia (antes Consejo de Promoción Turística) pueda actuar, hemos tenido participación prácticamente nula y no hemos avanzado, necesitamos que pueda funcionar bien”, señaló.
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