Hotelería de la Riviera Maya cerró con un promedio de ocupación general anual del 80% el pasado 2019, con una oferta que supera las 49 mil habitaciones, el indicador revela una caída de tres puntos porcentuales menos en comparación con el 2018, y siete puntos porcentuales en comparación con el año record de mayor ocupación, derivado del reacomodo que se está enfrentando en todos los mercados y de la oferta de 24 mil habitaciones que operan en renta vacacional y que no se tiene contabilizada.
Manuel Paredes, director de la Asociación de la Riviera Maya, dijo que los números al cierre del 2019 fueron favorables, pero revelan esa caída en la ocupación que se ha venido dando por diversos factores que inciden en el cuarto ocupado por noche.
“El flujo turístico es estable pero se tiene un reacomodo en todos los mercados”, expresó.
En este indicador, comentó que el mercado estadounidense muestra un decremento en comparación con otros años por condiciones geopolíticas que sin duda impactan la captación de visitantes, pero este descenso se ha venido compensado con la llegada de otros mercados.
A estos reacomodos, comentó que incide la creciente oferta de servicio. Tan sólo en Playa del Carmen donde operan ocho mil cuartos hoteleros, se refieren 24 mil habitaciones más que operan bajo el sistema de renta vacacional, sector que hasta ahora no tiene una medición y contabilización clara. (Hoteleros de Riviera Maya advierten un trimestre complicado en ocupación tras finalizar el verano).
Este año, consideró, deberán consolidarse herramientas que revelen con mayor exactitud estos indicadores de una manera eficiente que pueda medir la llegada de turistas, que garantice las cuestiones de seguridad y muchas otras cosas que van de la mano con este mercado, para tener indicadores que permitan seguir creciendo.
Estos puntos son fundamentales frente a los retos que se tienen en la región donde se tiene programada una construcción de otras 30 mil habitaciones, como ninguna otra región del país, que obliga a tener indicadores y herramientas precisas que le permitan al destino seguir creciendo en número de asientos de avión y en la llegada de turistas.
Esta agenda, dijo, se comparte con la hotelería de Cancún donde se ha logrado tener un intercambio de información precisa que va desde una bolsa de trabajo hasta indicadores y barómetros de medición que permitan seguir elevando la calidad de servicio y con ello, el retorno de visitantes.
En este sentido destacó que la capacitación permite elevar la calidad de servicios y en ello, el Caribe Mexicano se ha mantenido dentro de un margen altamente satisfactorio. (Yucatán a la Mano)
Agregar Comentario