El sector aéreo de América Latina y el Caribe manifestó su profunda preocupación por las intempestivas medidas y restricciones que limitan los viajes en la región y reiteró su llamado a los gobiernos para trabajar en la adopción de acciones equilibradas y estandarizadas.
El mensaje fue enviado en conjunto por el Consejo Internacional de Aeropuertos de América Latina y el Caribe (ACI-LAC), la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) y la Organización Civil de Proveedores de Servicios de Navegación Aérea (CANSO, por sus siglas en inglés).
Los organismos internacionales que agrupan a las aerolíneas que operan en Latinoamérica piden que las medidas de seguridad que exigen los gobiernos estén basadas en la evaluación de riesgos y costos de oportunidad para la población, que se ve directamente vulnerada por las restricciones que afectan millones de empleos en nuestros países.
ACI-LAC, ALTA, IATA y CANSO coinciden que la reimposición de medidas que se habían suspendido como las cuarentenas, aunadas a las pruebas, prohibiciones de vuelos a ciertos destinos, suponen un retroceso a los esfuerzos de recuperación de sectores como el turismo.
Rafael Echevarne, director general de ACI-LAC, destacó que desde junio pasado se ha notado una recuperación sostenida, que aún es muy paulatina, en noviembre alcanzó 45 por ciento de pasajeros comparado con el mismo mes del 2019, con cerca de 16 millones de viajeros en América Latina y el Caribe.
“Los aeropuertos han sido muy estrictos en la implementación de protocolos sanitarios. Además, la aplicación de pruebas previas en lugar de cuarentenas ha demostrado ser una alternativa sumamente eficaz, generando confianza a los viajeros y contribuyendo a la reactivación de los viajes y el turismo”, comentó Echevarne.
Para José Ricardo Botelho, director ejecutivo & CEO de ALTA, estas cifras demuestran el interés y necesidad de viajar, por lo que no ayuda el cerrar fronteras o imponer obstáculos a los pasajeros.
“Reiteramos la disposición para trabajar con los gobiernos en la implementación de mecanismos efectivos y sostenibles que garanticen la salud de pasajeros y ciudadanos, mientras recuperamos la conectividad y este importante sector económico”, agregó Botelho.
Por su parte, Peter Cerdá, vicepresidente regional de IATA para las Américas, enfatizó que el sector aéreo no puede actuar como al principio de la pandemia, más cuando la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que el virus no se controla con cuarentenas.
“Es imposible reducir la exposición a cero, pero hay estrategias inmediatas de gestión de riesgos. Como industria establecimos protocolos que garantizan la seguridad de los viajes, nuestra prioridad. Por eso debemos gestionar cómo vivimos con el virus sin poner en riesgo millones de puestos de trabajo, sin paralizar las economías que dependen de la aviación porque no hay otras alternativas de transporte rápido, seguro y fiable”, comentó el directivo de IATA.
Los organismos de la industria aérea de Latinoamérica concluyen que la aviación y el turismo son grandes motores del desarrollo socioeconómico de la región y trabajando de manera coordinada se recuperará la conectividad que genera millones de empleos y bienestar para la población. (IATA ajusta su previsión 2020-2021 para la industria aérea mundial).
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